domingo, 13 de noviembre de 2016

Macarons de pistacho y mascarpone



Nunca había probado ningún dulce con sabor a pistacho. La verdad es que me daba un poco de miedo hacer macarons para que luego no me gustaran, pero el sabor es de 10, y combinado con el mascarpone todavía más. Quedaron unos macarons muy bonitos, ricos y sorprendentes que os animo a que hagáis.


Macarons de pistacho y mascarpone
Ingredientes
Para las coquilles
- 90g de pistachos no salados (sin cáscara) molidos
- 60g de almendra molida
- 150g de azúcar glas
- 150g de azúcar blanco
- 4 claras de huevo (2 en un bol y 2 en otro, 60g de claras cada par)
- Colorante en gel o pasta (opcional)
- 60 ml de agua

Para la crema de mascarpone:
- 250g de mascarpone frío
- 250 de nata líquida para montar bien fría
- 60g de azúcar glas


Elaboración
Como siempre, explicaré la preparación como si supiérais lo básico sobre la elaboración de macarons. Si necesitáis una explicación más detallada, os remito a mi Tutorial: cómo hacer macarons.

1. El día de antes, separamos las claras de las yemas y ponemos 2 claras en un cuenco y las otras 2 en otro. Tapamos con papel film y reservamos fuera de la nevera.
2. Mezclamos la almendra molida con el azúcar glas. Pasamos la mitad de esta mezcla a una trituradora y damos varios golpes de turbo (pulsamos y rápidamente soltamos el botón para que no se haga una pasta). Tamizamos el resultado y echamos en el bol donde vayamos a preparar la masa final. Hacemos lo mismo con la otra mitad.
3. A esto añadimos los pistachos molidos y mezclamos bien.
4. Añadimos 2 claras (es importante que pesen 60g, así que hay que quitarle el exceso de peso) y mezclamos bien, sin miedo.

5. Pasamos a preparar el merengue italiano. En otro bol, montamos las otras 2 claras (nuevamente tienen que pesar 60g) a punto de nieve. Cuando estén montadas, en un cazo ponemos el agua con el azúcar blanco y calentamos hasta que llegue a 115º. Cuando llegue a esta temperatura, batimos las claras a velocidad media-alta y echamos rápidamente el sirope sobre las mismas, en un hilo. Cuando terminemos de echar el sirope, batimos a velocidad alta hasta que el merengue vuelva a temperatura ambiente. Si queremos añadir colorante, lo ideal es hacerlo en el merengue.
6. Echamos un tercio del merengue sobre la masa que habíamos reservado y mezclamos con movimientos lentos envolventes, de abajo a arriba y de fuera hacia dentro. Vamos incorporando merengue hasta que consigamos el punto de cinta. En ese momento, no echamos más merengue (a veces se usa todo y a veces no) y dejamos de remover.
7. Echamos la masa en una manga pastelera y hacemos círculos de masa en el papel de horno (yo uso la plantilla de webosfritos y os la recomiendo). 
8. Toca el secado. Debemos dejar la masa reposar hasta que al tocarla con un dedo ligeramente, no se nos quede pegada al dedo. Esto es imprescindible para que salga el pie a los macarons, y según el ambiente y la humedad puede tardar desde un rato hasta unas 2h (a mí no me suele tardar ni media hora).

9. Horneamos a 150º (la temperatura del horno debe ser muy exacta, así que si hay dudas recomiendo usar un termómetro de horno) durante 12-14 minutos. Una vez los saquemos, hay que dejar enfriar antes de intentar levantarlos del papel de horno. Si una vez frío, al intentar despegarlo se queda parte del macaron pegado al papel, es que le falta un poco más de horneado.


10. Para preparar la crema, simplemente hay que poner los ingredientes en un bol y batir con varillas hasta que quede una crema montada. Entonces, rellenamos los macarons con la crema y los metemos en la nevera 24h antes de comer para que alcancen la textura perfecta. Si se quieren preparar con más antelación, se guardan las coquilles sin relleno en el congelador y el día de antes de tomar se prepara la crema y se pasan a la nevera rellenos.



1 comentario:

  1. Hola! wow es super esta receta y quiero animarme hacerla!, me encanta el pistacho! Lidia!
    Me quedo por en tu blog! quédate en mi blog cuando gustes!

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