Receta básica de brownie

A veces nos complicamos demasiado. Se nos olvida que una casa no se empieza por el tejado sino que es imprescindible comenzar por unos buenos cimientos. A veces hasta hacemos una facultad nueva enorme y con mil cosas pero en  la que no van los ratones de ordenador o los alumnos se mueren de frío, pero ese es otro tema. Los detalles y las florituras no se sostienen sin una buena base a la que aferrarse. Aunque lo sabemos, todos nos precipitamos y queremos correr, avanzar demasiado deprisa, sin pensar que al final todo se va a desmoronar.

La cocina, como parte de la vida, también es así. A veces queremos hacer pronto las recetas más complicadas, las más vistosas y espectaculares, sin tener una buena base que nos permita seguir lo pasos correctamente. Sin tener en cuenta que además, muchas veces, las recetas más simples y básicas son las más buenas, las que gustan prácticamente a todo el mundo.

Por eso hoy traigo una receta base de brownie de chocolate, que no es la receta más difícil, la más rara ni la más vistosa, pero a ver quién le dice que no a un brownie. Lo mejor es que esta receta es eso, una base para mil postres diferentes, ya que podemos tomarla fría, caliente, con helado, sola, con sirope, como base de un postre más complejo... Y encima es facilísimo, puede hacerlo todo el mundo sin necesidad de muchos utensilios (no, no hace falta batidora de varillas). Además, da mucho juego, ya que podemos añadirle mil ingredientes diferentes para darle el toque que queramos según nuestros gustos.

Ingredientes

Para un molde redondo de 20-22cm o una bandeja rectangular de 15x25cm

Receta original de Alma Obregón

- 160g de mantequilla sin sal

-250g de chocolate negro de postres

- 160g de azúcar blanco

- 140g de azúcar moreno

- 3 huevos

- 120g de harina

- 1 cucharadita de extracto de vainilla

- Opcional: Podéis añadir infinidad de cosas tales como nueces, oreos, kinder, filipinos, almendras, chips del tipo de chocolate que queráis, trozos de chocolate blanco, after eights, frambuesas... Todo lo que se os ocurra según el toque que queráis darle. Incluso podéis añadir unos ingredientes a una parte de la masa y otros a otra según gustos.

Paso a paso

1. Precalentamos el horno a 180º (160 si tiene ventilador) y engrasamos el molde con mantequilla. Yo en mi caso puse papel de hornear encima de la bandeja y no tuve que engrasarlo. 

2. En un cazo, colocamos la mantequilla y el chocolate troceados y los derretimos a fuego lento, removiendo para que se mezclen. Una vez derretido retiramos del fuego.

3. Por otro lado, batimos los dos azúcares con los huevos y la vainilla hasta que todo quede bien integrado.

4. Poco a poco integramos el chocolate y la mantequilla batiendo hasta que quede todo homogéneo.

5. Por último, incorporamos la harina y removemos hasta que no queden grumos.

6. Echamos la masa en el molde y la repartimos bien. Si vais a añadir algún ingrediente opcional,si queréis que quede en mitad del brownie echad primero la mitad de la masa, agregad los ingredientes y luego echáis el resto de masa. Si queréis que queden superficiales (como las oreo que yo puse), echad toda la masa y luego los ingredientes, hundiéndolos un poco. Como he dicho, podéis incluso echar unos ingredientes en una parte de la masa, otros en otro, dejar un trozo sin nada...

7. Horneamos durante 40 minutos. Si veis que empieza a quemarse un poco por arriba, poned el calor sólo por abajo, pero esto depende de vuestro horno (como siempre digo, cada horno es un mundo y hay que conocer bien el que tenemos). Si lo vais a desmoldar, esperad a que enfríe un poco y entonces lo hacéis, con cuidado para que no se rompa (cuanto más caliente esté, más fácil es que se rompa, por lo que si lo vais a tomar caliente es mejor hacerlo directamente de la bandeja). Si no lo vais a tomar caliente directamente, dejad enfriar en una rejilla.