¡Hola!
Os traigo recién sacada del horno (y nunca mejor dicho) la tarta que he hecho hoy mismo. Los que hayáis visto "Animales fantásticos y dónde encontrarlos", película del universo Harry Potter, reconoceréis enseguida al protagonista de la tarta. Es uno de esos animales fantásticos, llamado niffler (o escarbato en español), que se dedica a coger todo lo que encuentra con un mínimo de valor. Fue el primer Funko que tuve y me apetecía hacer una tarta dedicada a él.
De sabor, como no podía ser de otra manera en este caso, he elegido el velvet (terciopelo), que además me apetecía mucho hacer una tarta con él. Al principio pensé en hacerla negra por fuera, pero al final la he hecho color plata para acompañar al oro de las monedas de chocolate.
En cuanto a la receta, da para cuatro bizcochos de 15cm, aunque yo sólo usé tres capas. También podéis hacer tres capas de 18cm o dos de 20cm, como viene en el libro "Objetivo: tarta perfecta", aunque yo he modificado las cantidades de los ingredientes de la crema para que saliera la cantidad adecuada para mis tres capas de 15cm.
Niffler cake (sabor red velvet)
Ingredientes
Para el bizcocho:
- 120ml de aceite de oliva suave
- 320g de azúcar
- 2 huevos
- 2 cucharadas rasas de cacao sin azúcar
- 3 cucharaditas de extracto de vainilla
- 250ml de leche (no tiene por qué ser entera)
- 2 cucharaditas de zumo de limón
- 300g de harina
- 1 cucharadita de bicarbonato de soda
- 2 cucharaditas de vinagre blanco
- Colorante en pasta (opcional)
Para la crema:
- 187g de mantequilla sin sal a temperatura ambiente
- 450g de azúcar glas
- 187g de queso cremoso (Philadelphia, no puede ser light)
- Colorante (opcional)
- Monedas de chocolate
- Funko Pop! Niffler
- Monedas de chocolate
- Funko Pop! Niffler
Elaboración
Para el bizcocho:
1. Ponemos en un vaso la leche y le echamos el zumo de limón. Reservamos (veréis que le salen unos grumos a la leche, es lo normal). También tamizamos en un bol la harina con el cacao y lo reservamos.
2. En un bol ponemos el aceite, los huevos y el azúcar y mezclamos hasta que quede todo muy bien integrado.
3. Añadimos la mezcla de harina y cacao y la leche y removemos hasta que quede todo bien mezclado y sin grumos, con paciencia. Si lo hacéis con una batidora os recuerdo que en este paso la velocidad siempre tiene que ser la mínima para que el bizcocho no se os quede duro luego. También os recuerdo que cuando esté listo cada paso, no batáis de más por la misma razón.
4. En un cuenco pequeño ponemos el vinagre y le echamos el bicarbonato. Empezará a hacer burbujas y entonces lo echamos a la mezcla y removemos.
5. Finalmente echamos la vainilla y el colorante y mezclamos hasta que tengamos la masa final.
6. Engrasamos con mantequilla cuatro moldes de 15cm, repartimos la masa en ellos y horneamos durante unos 20-22 minutos a 180º (hasta que al meter un palillo en el bizcocho, éste salga seco). Recordad que los moldes hay que llenarlos 2/3 de su capacidad para que no se desparrame la masa. Aunque hagamos cuatro, finalmente sólo usaremos tres.
7. Al pasar este tiempo, sacamos los bizcochos del horno y dejamos enfriar en una rejilla.
Para la crema:
Una vez fríos los bizcochos, hacemos la crema. Para ello ponemos en un bol el azúcar glas y la mantequilla y batimos con una batidora de varillas, primero a velocidad mínima para que el azúcar glas no salga volando y luego a máxima velocidad hasta tener una crema esponjosa. En ese momento añadimos el queso crema y batimos hasta que quede una crema con buena consistencia para montar la tarta.
Si queréis que la crema por dentro también sea de color, agregáis ya el colorante. Si como yo queréis que el color vaya sólo por fuera, agregad el colorante cuando ya sólo os quede la crema para cubrir el exterior.
Montaje:
Primero, recortamos con un cuchillo a los bizcochos las partes superiores que puedan hacer "montañita" para que las capas sean totalmente planas.
Colocamos una capa de bizcocho y encima una capa de crema. Si lo hacéis con manga pastelera y una boquilla, la capa de crema quedará mucho más uniforme y gruesa. Luego hacemos lo mismo con otra capa de bizcocho encima y finalmente ponemos la última capa. Entonces ponemos una fina capa de crema alrededor de toda la crema, la cual será la "capa sujetamigas", y llevamos a la nevera una media hora (la crema que vaya sobrando también).
Colocamos una capa de bizcocho y encima una capa de crema. Si lo hacéis con manga pastelera y una boquilla, la capa de crema quedará mucho más uniforme y gruesa. Luego hacemos lo mismo con otra capa de bizcocho encima y finalmente ponemos la última capa. Entonces ponemos una fina capa de crema alrededor de toda la crema, la cual será la "capa sujetamigas", y llevamos a la nevera una media hora (la crema que vaya sobrando también).
Pasada la media hora, procedemos a cubrir el resto de la tarta con la crema, poco a poco y alisando o haciendo los detalles que queramos, en mi caso la hice lisa.
Finalmente, colocamos encima las monedas de chocolate y el Funko y ya tenemos nuestra tarta. Para ello, yo he colocado en el centro unas cuatro monedas tumbadas sobre las que he puesto el Funko y luego he ido colocando las monedas desde él hacia la periferia de la tarta.
Para conservarla, hay que tenerla en la nevera porque si no la crema de queso se estropea.
¡Espero que os guste!